¿Alguna vez os habéis parado a pensar en vuestras rarezas?
Personalmente, me cuesta admitir como rarezas las particularidades de la mayoría de la gente. Mi opinión es más bien que somos todos tan parecidos unos a otros que cuando vemos en otra persona alguna característica que no reconocemos en nosotros mismos de manera natural, nos parece que es raro. Porque sí creo que somos parecidos, la cuestión es que no somos transparentes y a base de no comunicarnos como debemos, creemos que somos diferentes y nos es más fácil sentirnos lejos unos de otros. Bueno, tal vez la palabra no es "parecidos", cada individuo es único y asombroso, eso es, pero tenemos muchísimos puntos en común, sobre todo en cuanto a vivencias y emociones se refiere. He comprobado, como ya os he contado alguna vez, que en cuanto decides dejar que tu espíritu se sienta libre y comienzas a hablar y decir lo que te apetece compartir, es tremendo descubrir la cantidad de personas que tenías alrededor pasando por lo mismo que tú.
Pero las particularidades de cada persona es algo que me fascina y desde siempre he disfrutado observándolas. Tras mis años de análisis silencioso, puedo decir que algunas de esas particularidades son innatas, otras adquiridas con las experiencias y otras que desarrollamos siendo niños y que "encerramos" en una caja al hacernos mayores, a veces las volvemos a dejar salir cuando nos sentimos de nuevo seguros de nosotros mismos. Y es que cuando somos pequeños no existen los complejos.
Mi madre me ha contado que cuando era niña e iba al colegio, muchas noches, tras haberme dejado durmiendo con la luz apagada, al rato descubría que me había levantado de la cama, borrado la tarea que había hecho horas antes y, sentada en mi silla, estaba haciéndola de nuevo. (Esta historia siempre me pone los pelos de punta. ¿Cómo se puede ser tan perfeccionista cuando aún casi ni sabes deletrear "perfeccionista"?)
Algo que siempre me ha gustado hacer es comer salchichas calientes del microondas. Y no con tenedor y cuchillo, la enrollo en una servilleta y me la como a mordiscos. Incluso ahora que soy vegetariana, algún día muy esporádico me doy ese capricho.
Me entretengo continuamente pensando en qué palabras me gustan. Os cuento dos de mis preferidas: nube y pompa.
Desde que tengo memoria me ha relajado ponerme cabeza abajo, apoyada la espalda en una cama pegada a la pared, extender las piernas hacia arriba por esa pared. Hasta que empecé a compartir cama, y ésta ya se colocó en medio de la habitación, muchas noches me quedaba dormida así, con los pies hacia arriba.
Éstas son algunas de mis "rarezas", aunque yo no las veo como tal, y estoy segura de que al leerlas, algunos de vosotros os reconoceréis en ellas. Otro día os cuento más, si queréis. ¿Cuáles son las vuestras? ¿Alguna muy rara, muy rara? ¿O todo de lo más normal?
Have you ever stopped to think about those odd things in you? Personally, I find it hard to admit as "odd things" the quirks of most people. My opinion is rather that we are all so similar to each other that when we see anything in someone we don't recognize in ourselves naturally, we think it's just weird. Because I do believe we're similar, the point is that we're not transparent and since we don't communicate right, we believe that we are too different, so it's easier to feel far from each other. Well, maybe the word is not "similar", because each individual is unique and amazing, that is, but we have many points in common, especially it comes to experiences and emotions. I have found out, as I ever tell you, once you decide to let your spirit start to feel free and talk about what you feel like sharing, it's huge to discover how many people around you were going through the same you were.
But the quirks of each person is something that always fascinates me and I enjoy watching them. After my years of silent scan, I can say that some of these are innate, some are learned from living experiences and others we did as children and were "locked" in a box by ourselves when we became grown-ups, sometimes we let them out when we feel self-confident again. You know, when we are little, complexes don't exist.
My mom told me that as a child and went to school, many nights, after letting me asleep with lights off, after a while she found out I had gotten out of bed, had erased the homework I had done hours earlier and was sitting in my seat, doing it again. (This story always gives me goosebumps. How can you be such a perfectionist when hardly know even how to spell "perfectionist"?)
Something I always enjoy to do is eating sausages heated by the microwave. And not with fork and knife, I like to roll it up in a napkin and biting. Even now I am veg, some very sporadic day I give myself the treat.
I entertain myself constantly thinking about what words I like. I tell two of my faves (the words in english: popped and weird).
From what I can remember, I've always got relaxed by putting myself head down, leaning back in a bed which is against the wall, extending my legs up on that wall. Until I started to share a bed, and this one is already placed in the middle of the room, many nights I fell asleep like that, feet up.
Those are some of my "quirks", but I don't see them as such, and I am sure that by reading, some of you will recognize yourselves on them. Another day I'll tell more, if you are in the mood. Which are yours? Any really, really weird? Or all perfectly normal?
Foto/ Top photo via Live Good.
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