1 de febrero de 2012

Just a mum/ Sólo una mami


Son muchas las decisiones que debemos tomar, y acuerdos a los que hay que llegar, durante los nueve meses que pasamos esperando la llegada de nuestro primer bebé (que en realidad no son nueve, sino ocho o incluso menos, el tiempo restante desde el momento en que te percatas de que no volverás a ser mujer una vez al mes durante algún tiempo).

El nombre, la decoración de su cuarto, el tipo de cuna, la ropita, son algunas de las preocupaciones absurdas que, curiosamente, pueden parecer muy importantes desde detrás de la barriga. Pero las verdaderamente importantes son cómo vamos a criar a nuestro bebé, si le darás el pecho o biberón, si practicaremos colecho, el manual de quién pensamos seguir para enseñarle a dormir y a comer si es que pensamos enseñarle a hacer esas cosas, si irá a la guardería o tendrá una nanny... Y éstas son sólo las que se plantean antes de verle la carita y de que se instale en vuestras vidas un inesperado "caos" (para los que no sean padres aún, tranquilos, es temporal o eso te hace creer tu mente a la larga...), pues una vez en casa los tres, y según pasan los meses, la lista de decisiones importantes va aumentando. Cada día es una aventura y, por tanto, son muchos los caminos que se cruzan y los mapas a descifrar. 

Como mamá relativamente reciente, pues insisto en que, a pesar de haber pasado sólo un año (casi) mi percepción interior es como si hubieran sido diez, aún me encuentro muchos días en la esquina del dilema, en el cruce de las calles "lo que debo" con "lo que me apetece". No sabría decir qué actitud es la adecuada, si es que hay alguna que sea mejor que otra. Aprovecho para aclarar algo: nunca había dedicado demasiado tiempo a pensar en el hecho de ser madre, era algo que sabía que haría en algún momento pero no estaba entre mis prioridades ni sentía el tan famoso "instinto". Luego, buscamos el bebé, llegó el bebé, y con él esta pregunta: ¿cómo he podido vivir sin él hasta ahora?. Por este motivo, antes del embarazo no sabía nada acerca de los distintos tipos de crianza y corrientes que circulan.



El instinto aparece en el mismo segundo en que ves a tu hijo/a por primera vez. Es una sensación indescriptible y, a pesar de que no tengo la experiencia, me atrevería a decir que nunca más vuelves a sentir esa mezcla tan salvajemente intensa de amor, miedo, alivio y valentía. Amor, porque te acaban de mostrar a "esa cosita" que sientes como parte de tu cuerpo (igual que una de tus manos o tu cuello, pues es literalmente una parte de tu cuerpo y se ha formado dentro) y no puedes creer que esté delante de ti; miedo, porque terminó el período de protegerlo con tu organismo y tu piel, y empieza la etapa de becaria, pues tienes que hacer que sobreviva (de verdad que es éste el pensamiento) y no sabes hacer nada (o eso crees); alivio, porque cuando ves que tu hijo/a está sano, y se ha gestado correctamente, el suspiro interior se debe oír hasta en Plutón (ese planeta que está tan lejos y es tan pequeñito, que no lo quieren ni considerar planeta al pobre); y valentía porque, sin planificación anterior (oh, y la planificación, qué presente está en el embarazo!), resulta que aflora un valor que desconocías para afrontar lo que venga y haga falta para que tu hijo/a esté siempre bien. Como me dijo mi tía en una ocasión, te sale la leona que llevas dentro, jejeje, aún me río cuando lo recuerdo, pero qué razón llevaba, como siempre.



Las que sois madres ya, ¿sentisteis esa mezcla de sensaciones al ver a vuestro bebé? Y las que no lo sois aún, ¿qué hay en vuestra lista de decisiones importantes para cuando llegue el momento? Y los hombres, ¿sentís algo parecido a esto que describo? Tengo verdadera curiosidad.




La autora de estas maravillosas fotos es también la autora de este blog


There are many decisions we should make, and agreements we should reach, during the nine months we spend waiting for the arrival of our first baby (which actually are not nine, but eight or less, the remaining time from the moment when you realize that you wont be a woman once a month again for some time).

What name we’ll choose, which room decoration, what kind of crib, what clothes, are some of the illogical concerns, that can oddly seem very important from behind the belly. But the truly important ones are how we will raise our baby, breastfeeding or bottle, co-sleeping, whose guide we’ll follow for teaching the baby to sleep and eat, if we really are into teaching him to do those things, child-daycare center or babysitter... And these are just those popped up before you guys see his little face and an unexpected ‘chaos’ installs in your life (for those who are not parents yet, don’t worry, it is temporary, well or that’s what your mind makes you believe in...), because once the three of you get home, and months go by, the list of important decisions is increasing. Every day is an adventure and, therefore, there are many paths crossing and maps to decipher.

As a relatively new mom, because I insist, despite only one year (almost) has gone by, I feel them like ten, many days I still find myself on the corner of the dilemma, the intersection of ‘what I should’ street with ‘what I want’. I would not know to say what attitude is the right one, if there is one that is better than another. Here’s something I want to clarify: I had never spent too much time thinking about being a mother, it was something I knew I would do at some point but was not among my priorities, and I neither felt this so famous ‘instinct’. Then, we looked for the baby, the baby arrived, and with him so did this question: how I ever lived without him so far? That’s why, before pregnancy, didn’t know anything about the different types of parenting.

This instinct appears in the very second you see your son/daughter for the first time. It is an indescribable feeling, and though I have no more experiences, I dare say you will never again feel that wild intense mix of love, fear, relief and courage. Love, because you just saw ‘that little thing’, who you really feel like part of your own body (just as one of your hands or your neck, it is literally a part of your body since he/she has grown inside) and can’t believe he or she is just in front of you finally. Fear, because the period to protect him or her with your body and your skin is over, and stage as an intern begins, because you have to do him/her to survive (seriously, this really is the thought) and you don’t know how to do anything (or so you think). Relief, because when you see your son / daughter is healthy and has been gestated correctly, your sigh can be heard from Pluto (this planet is so far and so tiny, they do not want it even to consider a planet, poor thing). And courage because without previous planning (oh, planning, so present during pregnancy!), turns out an unknown bravery emerges to face whatever it takes to make your son/daughter feels always perfectly well. As my aunt told me once ‘you will let the lioness in you to get out’, lol. Seriously, I still laugh when I remember, but she was right, as she always is.

So, those who are mothers already, did you guys feel the mixture of sensations when you saw your baby? And those who aren’t yet, what's on your list of important decisions when the time comes? And men, do you feel something similar I just described? I am so curious!



These amazing pictures were taken by this blog's writer. 

11 comentarios:

  1. No tengo hijos, soy de las que les coge el pánico solo de pensarlo...però como ya sabes veo cada día un sin fin de padres y madres con los que comparto la educación de sus hijos...y te aseguro que vuestros hijos pueden estar tranquilos de tener a madres como tu, como mis queridas amigas, que lo dais todo, que os lo cuestionáis todo (hasta a vosotras mismas), que vuestra prioridad es la felicidad de vuestro hijo, aunque eso signifique a veces reconocer que es impossible hacerlo todo bien!

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  2. Oye Gemmita, que me haces llorar y todavía no es ni mediodía!! Qué suerte de tenerte, amiga. Un beso

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  3. Pues no tengo hijos aún pero cuando estoy con Teo o Valentina puedo intuir, casi sentir, todo lo que dices. Por supuesto pasamos horas las parejas pensando y planificando como será o como querríamos que fuese nuestra futura paternidad, pero al final la vida se encarga de desplanificarlo todo y eso es lo maravilloso, no? Sé que mi amiga Kath no "planifica" nada con Valentina (ni siquiera ella era parte "del plan")y sin embargo Nando, tras pasar 10 minutos con ella en brazos, vuelve al trabajo feliz y con otra perspectiva, no es eso lo mejor?? así que, hombres, atreveros más! ir de aperitivo con vuestros amigos y los bebés...funciona!

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  4. No puedo estar más de acuerdo. A eso me refiero, planificar es una pérdida de tiempo porque la vida, en casi todas las ocasiones, te lleva a un punto bien distinto al que pensabas alcanzar. De esto hablo en el post de pasado mañana, precisamente. Ah, y por cierto, no me extraña que Kath no planifique con Vale, es que con los niños, planificar no sirve de nada!!!

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  5. Tampoco yo soy madre pero creo que una empieza a serlo incluso antes de que el espermatozoide fecunde el óvulo y cree un cigoto y después un embrion y posteriormente un feto.
    Una empieza a ser madre cuando empieza a tener dudas, miedos, alegrías respecto a la maternidad
    Incluso las que dicen que no quieren ser madres y de verdad no lo quieren ser por un instante lo han sido.
    Mujeres con hijos o sin hijos con idea de tenerlo o no...tenemos como dice Carol coraje de leonas y eso nos hace mas felices sin duda . Igual me ha salido una arenga feminista (no lo pretendo)también creo que hay muchos leones por ahí

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    1. tú eres leona, tigresa y leoparda! Y si decides ser madre, serás una increíble, e increíblemente guapa además!!!

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  6. Totalmente de acuerdo con tu post. Sobretodo con la pregunta ¿Cómo podíamos vivir sin Margarita hasta ahora? Me alegra reconocerme en lo que escribes... sabes que estaba pensando en cortarme el pelo cuando leí tu post de la semana que pasada? Qué gracia!! Una de las cosas que más me gusta de la recién estrenada maternidad, es verme a través de la mirada de mi peque, para ella soy SU MADRE, y me hace sentir tan orgullosa... Un beso muy fuerte desde Pamplona!

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    1. Wow, qué alegría ver tu comentario aquí! Lo vi anoche en la cama ya, y me dormí con una sonrisa. No me sorprende nada lo del pelo! jejeje! Y lo que dices de verte a través de su mirada, te entiendo bien, es una sensación increíble, un orgullo tan sano... Un beso grande grande para Mini M, y para vosotros, muuua!

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  7. Mi querida amiga! Cuánto aprendo contigo! Y cuánto lo agradezco, qué cerca me siento de ti navegando por tu mágico blog!

    Has dado a luz a Teo y él te ha llenado de luz. He visto nacer en ti una fuerza muy grande y distinta, siempre he pensado en la maternidad como en la más maravillosa de las creaciones. Considero que los niños son nuestros maestros, ellos nos guían. Cada vez estoy más convencida de que alcanzada la edad "adulta" se apodera de nosotros una duda constante, con tendencia al egocentrismo y al pesimismo… Y creo que hay dos cosas en el mundo que nos salvan: el arte y los niños. Es una cuestión de energías, hablo de sensaciones, de entender y sentir lo más simple y lo más complejo a la vez, y si estamos dispuestos a dejarnos llevar y a no controlar las emociones, wow! Cuánto podemos aprender!
    Uno de mis sueños es ser madre, y en mis entrañas la leona comienza a rugir!

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    1. Si tengo magia y luz, tú eres parte de mi magia y de mi luz. Tan lejos y siempre tan cerca, tú eres parte de las pilas que hacen que alumbre, lo sabes.
      Esa leona que ruge, mira a ver si te araña un día de estos, que la tienes ahí hace no se cuánto, jajaja.Tú dale piensito mientras, que todo llega, y tus hijos serán los más bonitos, dulces, guaposexóticos jur, y fefos. Y los mejores amigos de Teo.

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  8. jajajajajajaja... cuánta razón tienes, piensito le voy dar, porque esta leona es de las Fefonas! Qué bueno, qué bien sientan estas risas que nos echamos!

    Como dice la letra de una canción: "Saber que estás ahí me hace más fuerte"! Y me acabo de dar cuenta de que cambiando el orden de las letras de la palabra "Magia", aparece la palabra "Amiga", es increíble, no? Magia, basta con querer creer!

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