Los vestidos vintage de Susi

Atención Barcelonesas y "alrededoras": ¿Conocéis el mercado vintage Susi Sweet Dress? Es un mercadillo itinerante que durante un fin de semana, de vez en cuando, se instala en un local de Madrid o Barcelona- por lo general monísimo y si no, al menos diferente- donde podemos encontrar vestidos de los años 50, blusas, faldas y complementos vintage que Susi trae de sus viajes por el mundo. 

Como amante del vintage en todos sus géneros, he tenido la suerte de poder ir a dos, uno en Barcelona cuando aún vivía allí, y otro en Madrid hace unas semanas. Además de lo que salta a la vista nada más entrar que no es otra cosa que un mercado montado con amor, donde todas las prendas están en perfecto estado, limpias y planchadas, encuentras una barra para tomar cava o cerveza a tu izquierda y puestos de bisutería maravillosa, lo que capta mi atención- y mi fidelidad- son los pequeños detalles:

. Las espectaculares telas de las prendas, de una riqueza a la que Zaros y Mangas no nos tienen acostumbradas.

. El corte, las costuras, la caída, los botones estratégicos para que quede perfecto.

. La música que suena de fondo, el mejor jazz clásico y más.

. Si la falda que te gusta te queda un poco grande, una costurera la estrecha allí mismo para que te la puedas llevar.

. Dibujos de la gran Amaia Arrazola alrededor.

. Una mesa con decenas de lápices de colores y legos para que los peques se entretengan mientras puedes tomarte con tranquilidad una copa de cava gratuita.

. La dulzura y la sonrisa de cualquiera a quien preguntas una duda sobre las prendas.

De Madrid volví con dos camisetas con escote en la espalda y dos blusas que me enamoraron. Son piezas únicas, el vintage tiene algo que no tienen las prendas fabricadas en serie. Tienen historia y magia, y la energía de quién cortó la tela y las cosió. Soy una romántica, lo se, pero también se que es cierto esto que digo.

Este fin de semana se celebra en Barcelona otro Susi Sweet Dress. Hoy, a partir de las 16.30 hasta las 21.00 y mañana desde las 12.00. Aquí tenéis la dirección y los datos necesarios para plantaros allí y sentir esta magia y buen rollo que os cuento que causa el vintage. Y si no vivís en Barcelona ni cerca y estáis curvando los labios hacia abajo, hay remedio: su tienda online.

P.D: No penséis que las prendas son caras. Os sorprenderá lo económico que puede ser un tesoro.