22 de febrero de 2012

Not just a mum: la dieta / No sólo una mami: the diet


Soy vegetariana. No lo he sido siempre, creo que va para dos años. No me desperté un día y me dije " a partir de hoy no voy a comer carne", ocurrió paulatinamente durante los primeros meses de mi embarazo. Ya antes de esto no comía pescado ni marisco, porque soy alérgica, cosa que tampoco he sido desde siempre, sino desde hace seis años aproximadamente (¿sabíais que una alergia puede aparecer repentinamente, así puuf! aunque seas ya adulto?). 

Tuve uno de esos embarazos "buenos", siempre hay cositas no del todo agradables pero lo cierto es que no me puedo quejar demasiado. Una de las ventajas de las que gocé fue que no padecí náuseas ni vómitos, ni al principio ni al final. Y fue gracias a esto por lo que me di cuenta de que la carne no me estaba sentando bien.
No me apetecía comerla, la verdad, pero en un esfuerzo por "alimentarme bien", como todos decían que debía hacer, intentaba de vez en cuando comer algo de pollo o ternera. No podía. Literalmente, me parecía muy desagradable, y tanto fue así, que la única vez que vomité durante todo el embarazo fue tras hacer un intento de comer carne. Bueno, y os confieso que cuando iba al supermercado a hacer la compra, no podía ni mirar las bandejas de muslitos y filetes, porque al mirarlos... veía animalitos muertos, y pensaba "ay, estos pobrecitos eran mamás o tenían mamá". De verdad, esto es real. Seguramente a algunos de vosotros/as os parecerá de lo más ridículo, pero para mi no lo era. El embarazo tiene estas cosas.

Bien, pues convertirme en vegetariana fue una etapa agridulce, que todavía hoy lo es a ratos. Yo estaba feliz, me sentía genial, me encantaba la comida, comencé a cocinar un montón de recetas nuevas, a probar nuevos alimentos y a introducir de forma permanente otros que antes sólo comía de vez en cuando, ah si, y me volví mucho más creativa como cocinera casera. Y os confieso que, a nivel físico, nunca me he sentido mejor, entonces y también ahora que lo he mantenido. Pero por otro lado, no fue fácil para algunas personas de mi entorno aceptar mi nueva condición. La mayoría de ellas, no son de mi generación, por lo que puedo entender que no les sea fácil comprender que una persona puede estar bien alimentada y sana sin necesidad de comer carne o pescado. Y supongo que más aún estando embarazada, pues también son muchos los que siguen creyendo eso de "ahora tienes que comer por dos", que no es necesario, ya lo dice el ginecólogo desde el primer día. Así que durante todo mi embarazo, tuve que lidiar cada dos por tres con la lucha de querer y necesitar ser vegetariana y, al mismo tiempo, no decepcionar a algunas de las personas que más me importan, e intentar constantemente hacerles ver que tanto yo como el bebé de mi barriga estábamos perfectamente bien. 

Me encontré muchas veces con caras largas y también en situaciones de este tipo:

1. Comer lentejas con chorizo, panceta, etc, y platos similares.
2. Anunciadas "paellas de verduras" con jamón serrano picadito en trozos pequeños por todo el plato.
3. Incomprensión frente al hecho de que no quería comer carne y además "no me gustaba" el pescado.
4. Enfados irracionales repentinos por no querer cocido.
Y un largo etc. 

Recordar esto me hace reir. Porque algunas de las personas protagonistas de estas anécdotas, que se reconocerán si leen esto, son personas muy importantes y muy presentes en mi vida, las quiero mucho, y pueden llegar a ser pesadas a rabiar, pero se que todo es preocupación por mi bienestar.

El embarazo llegó a su fin, y fue la clave para que la mayoría de los que creían que estaba siendo una irresponsable haciendo una dieta espantosa de cara al desarrollo del bebé, enmudecieran, pues el supuesto bebé desnutridito resultó ser un Teo de 4,240 kg y 57 cm al nacer :)

En definitiva, el embarazo es un período de lo más singular, te conviertes en otra persona, a veces por nueve meses, a veces para siempre. Hay altibajos, sensibilidad, dudas, alegría, lágrimas que no sabes de dónde vienen, paz, mucho amor... y a veces vegetarianismo. 

¿Qué hay de vosotros/as? ¿Alguno/a es vegetariano/a o está en contra de este tipo de alimentación? Las que ya habéis pasado por embarazo o estéis en ello, ¿habéis experimentado rechazo por algo o, por el contrario, apetencia excesiva por una comida en particular? ¿Anécdotas con familiares o amigos? Besos!

I'm a vegetarian. I have not always been one, it's close two years now. I did not wake up one day and said -I'm not gonna eat meat anymore-, it happened gradually during my pregnancy's first months. Before this, I was not eating fish and seafood neither bacause I'm allergic, something I've not always been neither, but six years ago (Did you know you can suddenly become allergic, like poof!! although you already are a grown-up?).

I was lucky enough to have one of those 'good' pregnancy times, you know there are always some not-so-nice things but the truth is I can not complain at all. One of the advantages I enjoyed was I suffered no nausea or vomiting. Thanks to this I realized meat wasn't being a good thing for me then. I didn't want to eat it, but in an effort of feeding myself in the right way everyone told me I should , I tried. And I couldn't. Literally, it was disgusting to me, so much so, the only time I threw up along the pregnancy was right after a meat-eating try. Plus, I have to confess when I went to food-shopping, I coudn't even take a look to the take-away meat trays because I didn't see meat, I saw dead animal, and thought -noo, these poor things were mamas, or had a mama!-. This is true, believe me. I'm sure some of you are thinking right now how ridiculous I sound, but it was not for me. Pregnancy has these things...

So, becoming a vegetarian was a bittersweet time, still is sometimes. I was happy, felt great, loved the food, started cooking a lot of new recipes, trying some new foods and introducing new ones into my diet that I only ate from time to time, oh and I turned much more creative as a home cook. And I confess I have never felt better, phisically, then and now that I keep being a veg. On the other hand, It was not so easy for some of my people to agree with my new condition. The most of them are not my age, that's why I can get it is not that easy to understand that someone can be well fed and healthy with no need to eat meat or fish. And I guess it gets worse with the pregnancy thing. They are still many the ones thinking a woman has to eat twice during pregnancy, and it's not necessary, your doctor says at first chance. So for nine months I had to fight to continue being a vegetarian at the same time I didn't want to disappoint some of the most important people in my life, while trying constantly to show them that I and the baby inside me were perfectly good.

I found myself often with bitter faces and also in situations this kind:


#1. Eating lentils with sausage, bacon, and similar recipes.
#2. Announced as "vegetable paella" with chopped ham into small pieces around the plate.
#3. Not understanding at all the fact I did not want to eat meat and also 'I did not like' fish.
#4. Sudden irrational anger because I did not want beef stew.
And much more.


Remembering this makes me laugh. Because some of the protagonists of these stories, who recognized themselves if they read this, are very important and very present people in my life, I love them much, and they can be persistant to crazy, but I know all this is concern for my welfare.

The pregnancy ended, and was the key for most of those who thought I was being an irreponsible dieting dreadful towards the development of the baby to mute, because the malnourished baby turned out a Teo with 9,35 lb and 57 cm.

In conclusion, pregnancy is an unusual period, you become another person, sometimes for nine months, sometimes forever. There are ups and downs, doubts, joy, tears you don't know where they are coming from, peace, much love... and sometimes vegetarianism.

What about you guys? Do any of you are a vegetarian, or are against this type of diet? Those who have already gone through pregnancy or those who are on it, have you experienced rejection by something or excessive craving a particular food? Funny anecdotes with family or friends? xo

4 comentarios:

  1. Mi amiga Katharine es vegetariana. También ha tenido una niña sanísima y no precisamente delgada je je.
    Ella empezó a los 12 años. Tuvo que hacer un trabajo de ciencias e hizo una incubadora. Ella y su compañera pusieron patitos y pollitos y todos nacieron con éxito. Ella se quedo los pollitos y su amiga los patitos. A partir de que unos pollitos creyeran que ella era su madre no volvió a comer carne. Lo mas alucinante para mi es que sus padres respetaran su decisión a los 12 años. Me parece admirable. Cuantos padres españoles dirían "pero que tontería, tomate el bistec y el bocata de jamón y dejare de tonterías!"
    A mi me gusta el jamón y el bistec, aunque me da mucha pena ver el trato que se da a lis animales y lo limito al maximo, pero seria maravilloso que todos fuésemos como los padres de Kath con cualquier decisión que tome la gente a nuestro alrededor.

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    1. No puedo estar más de acuerdo con ese deseo. Y me deja helada lo de Kath, porque para este post, y antes también en alguna ocasión, he investigado sobre las incidencias directas del vegetarianismo en los fetos, y cuál ha sido mi sorpresa al saber que muchísimos de los hijos de vegetarianas, nacen enormes y gordotes. Como me dijeron las enfermeras al segundo de nacer Teo... "este niño ya viene medio criado!"

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  2. Pues yo debo ser una de las pesadas a rabiar, pero ya se sabe... amor no quita conocimiento...
    Personalmente no tengo nada en contra del vegetarianismo, lo único es que implica un menú mucho más variado y elaborado que los de los "otros" y hay que tener tiempo y despensa para ello y si eso no se cumple se pueden producir deficiencias importantes para el organismo.
    De resto nada que objetar, pero reconozco que para mi no es facil de asumir porque lo encuentro bastante monótono.

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    1. jejeje, qué incrédula!! jeje! pues como ya te he dicho otras veces, nada de monótono, se trata de ser creativo y no tirar de lo primero que encuentres en la nevera. Para mi es hacer arte en el plato. Algunos platos de esta semana: hamburguesa de polenta, pita de hortalizas con salsa de mostaza a la miel, macarrones al tikka masala, spaguetti de maiz (no de trigo) con una salsa blanca, tortilla da calabaza, etc. Qué te parecen? Y esta noche, lentejas con verduras al curry!

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